
El 26 de julio pasado tuvimos la oportunidad de participar en el ciclo “Mateando con Hebe y lxs jovenxs” de Madres de Plaza de Mayo. Podés encontrar la charla completa con la participación de nuestra compañera en @madresdeplazademayo.
- Hebe, antes que nada queremos agradecerte por esta oportunidad. Es un orgullo poder charlar con vos, que sos de las personas que más nos ha enseñado a luchar y a salir a la calle para reclamar lo que nos pertenece. En el último tiempo se popularizó la discusión sobre el dragado y balizamiento del Río Paraná ante el vencimiento de la concesión sobre la mal llamada “Hidrovía”. Pensando el tema desde el eje de la soberanía nacional sobre los recursos naturales y las riquezas de nuestro suelo, ¿podemos pensar en recuperar el control de este sector para que la riqueza vuelva a nuestro pueblo?
Los recursos naturales se han ido recuperado bastante con los compañeros que están sembrando y que hace rato están trabajando: los pequeños productores y las cooperativas hacen un trabajo impresionante, están poniendo en cada ciudad lugares de venta donde lo que se compra es comida que no está contaminada. Podés comprar manzanas que tienen otro gusto, verduras que tienen otro color. Hay que aprovechar en los lugares donde estén y comprarles porque es una maravilla.
Ese es un ejemplo de cómo podemos ir recuperando de a poco nuestros derechos. También tenemos que tener gobernantes que nos ayuden a recuperar la tierra, a dársela al pueblo para sembrar, para hacerla productiva y sacársela a quien no la produce… porque están quienes alambran y alambran pero después no producen nada… que la tierra improductiva venga para este lado, para quien la produce.
En cuanto al tema del Río Paraná, fue algo novedoso que hasta ahora se nos había ocultado. Lo encontramos cuando nos llevó Cristina y nos contó qué había pasado, cómo se había encadenado y defendido ese lugar, pero quedó ahí, como un hecho histórico… resulta que lo que algunos nunca supieron, a mí me lo habían enseñado unos compañeros de San Lorenzo hace más de 20 años. Más que nada, quiénes se habían apoderado de las costas del Río Paraná, que fue la empresa Cargill en aquel momento, y ahora hubo diputados y gente muy inteligente que se puso a investigar y se destapó la olla, como quien dice, y es una “caja de pandora”, que mientras más abrimos más encontramos… están adueñados de toda nuestra riqueza. Lo que sembramos se lo llevan a otro lado, y no sabemos cuánto ni cómo, del río hacen lo que quieren… las balanzas que tampoco son nuestras… el río lo dragan al saber y entender de ellos y no pagan nada, ningún dinero nos queda a nosotros, ni el dinero ni lo que se siembra, porque lo sacan de contrabando y se lo llevan a Paraguay o Uruguay. Ahora resulta que Paraguay vende más de lo que produce, ¿cómo es eso?, si vende más de lo que produce es porque lo afanan acá y lo venden allá…
Entonces, de todo esto que se está descubriendo, me parece maravilloso que la juventud, como ustedes, se preocupe, se ocupe y lo destape. Hay que describirlo y dárselo a conocer a todos. Ustedes, que trabajan en una revista, hagan notas, llamen a las personas interesadas, las que saben, que son muchas…
Ustedes, los jóvenes, son el presente, no sólo el futuro. Hay que darles toda la fuerza y posibilidades para que trabajen y hagan interesar a sus compañeros en estos temas.
A veces, parece que en este momento sólo hay cuatro cosas: ver quién va de diputado, quién de senador, quién gana las elecciones y si nos damos muchas o pocas vacunas. No nos podemos centrar en eso nomás. Es importante, no digo que no. Pero resulta que mientras discutimos estas cosas, los otros nos pasan por encima.
- En este sentido, en un año electoral y en un contexto de crisis, ¿qué expectativas tenés sobre la representación política? ¿Se van a ver mejor reflejados los intereses populares y soberanos o va a haber una mayor tendencia nuevamente hacia lo neoliberal o de mayor concentración en el marco del capitalismo?
El liberalismo y el capitalismo son las dos grandes pandemias que tiene el mundo. El capitalismo es peor que el virus, no ha podido dar muestras de que sea otra cosa que una dominación permanente y constante sobre nuestros pueblos, que somos países ricos con poblaciones pobres, y por eso nos atacan, porque se quieren quedar con lo que tenemos. Con el agua, el litio, el cobre, el petróleo, con lo que tengamos.
Cada vez son más las cosas que ellos necesitan de nosotros, y ése es el capitalismo y el liberalismo. Así que, si no rumbeamos para el socialismo, los pueblos estamos en el horno mal, porque cada vez hay menos trabajo, más pobres, más muertos de hambre, y el capitalismo siempre avanza.
Y encima nos toca esto de que no podemos salir, no podemos marchar hace casi dos años y claro, se pone grave. Igual hay mucha gente laburando, haciendo y escribiendo y me parece que eso es lo que tenemos que ver. Y el trabajo que hace la juventud en este país… yo estoy chocha… pero bueno… casi sin dirección política a veces…
- En los últimos días la Corte Suprema de Justicia de la Nación devolvió a Casación la falta de mérito de Blaquier por los hechos en los que está imputado en Jujuy. Ante esto, quisiéramos preguntarte: ¿qué podría o debería hacerse respecto de los responsables civiles y empresarios más allá de los genocidas militares, y cuáles son las deudas de la democracia en los juzgamientos de los crímenes de lesa humanidad de estos sujetos que también fueron responsables?
Hay juicios que no vamos a ganar porque ya pasó mucho tiempo, 44, 45, 46 años, no es posible. Yo creo que lo más importante, lo que más les duele más allá de eso, es una buena organización que los repudie y que nunca más los vuelva a votar.
Eso es lo más fuerte que tenemos que hacer. Pelear, pelear y pelear, organizarnos con mucha fuerza para que nunca más vuelvan los Macri, los milicos, la gente con esa cabeza, esa cabeza asquerosa, inmunda, repugnante, de matar, matar y matar. A hombres y muchachitas jóvenes que luchaban y peleaban con un sentimiento y con una garra que, la verdad, no puedo creer que no estén más, no puedo creer que hayan hecho semejante masacre y que este pueblo esté callado. Lo que tenemos que hacer es eso, estar organizados y preparados, no perder tiempo en los juicios.
Hay que hacer juicios ahora, a Macri, no a los milicos, en eso no se puede perder más tiempo. Las madres hace rato que no hacemos más juicios para ese lado. Estamos abocadas al ahora, a lograr que se los condene y se los meta en cana a los de ahora. A todos estos atorrantes que hay de a montones. Y también a la Corte Suprema de Justicia hay que meterla presa, no te creas que no… porque la Suprema Corte… madre mía… de “suprema” no tiene nada, y no te cuento de Corte…